martes, 1 de febrero de 2011

Robert Bal (El Quejigo)


Roberto, está afincado en una pequeña aldea de Jabugo, el Quejigo.Allí es donde tiene su taller y hace estas piezas únicas y exclusivas.

Los materiales que utiliza son hilo de plata y piedras naturales a los que les va dando forma cuidadosamente.



viernes, 28 de enero de 2011

Hermanos Valle

Hermanos Valle es una fábrica de sillas de madera artesanales con asiento de enea al más puro estilo tradicional. Con estos elementos naturales y con una cuidada dedicación se fabrican las sillas y mesas que llenan hogares, establecimientos y ferias de toda España. Dos son los estilos que la fábrica de Sillas Hermanos Valle ha venido realizando desde sus comienzos, hace ya más de un siglo.
  • Estilo decorado o "sevillano": caracterizado por su decoración a base de flores de vivos colores sobre fondos rojos, azules, verdes o blancos. Los productos con esta terminación son una seña de identidad de ferias andaluzas y de cortijos o establecimientos con trasfondo andaluz y flamenco.
  • Estilo barnizado o rústico: terminaciones en madera sin tratar, barnices, nogalinas o color miel evocan el gusto por lo sencillo, natural y tradicional. El creciente auge del amor por lo rural y la vida tranquila han revivido y consolidado los ambientes rústicos en los que estas sillas y mesas se convierten en elementos decorativos perfectos sin dejar de lado la funcionalidad y comodidad. En numerosos alojamientos y establecimientos de turismo rural están presentes los productos de Sillas Hermanos Valle.

jueves, 27 de enero de 2011

Tamborilero

 Juan Manuel Mozo Díaz, conocido entre sus paisanos por Mozo, es el tamborilero oficial de Aroche. Desde muy joven aprendió a sacar de su flauta y tamboril las notas que alegran las fiestas y romerías, no sólo de su localidad sino de varios lugares de la provincia y fuera de ella. Mozo es un ejemplo a seguir,  por las nuevas generaciones,  para mantener el folclore de nuestra tierra.

Artesanía en madera

Fruto de la tenacidad de dos jóvenes artesanos, Rafael Valiente y Juan Carlos Delgado, son estos trabajos artesanales en diferentes tipos de madera: olivo, alcornoque, nogal,  naranjo, etc. Botelleros, expositores de vinos, lámparas, figuras decorativas, son algunos de los objetos labrados pacientemente a mano.

La salchicha arochena

La salchicha de aguardiente es un producto derivado del cerdo ibérico. Uno de los manjares típicos más apreciado en esta localidad, con unos aliños muy particulares que le dan un sabor especial. Se puede comer frita o asada a la brasa. También fresca cuando han pasado unos días desde su elaboración y está asentada. Últimamente algunos bares han creado la tapa de salchichas cocidas con pinatel, una delicia gastronómica.

Las monturas


El guarnicionero de la localidad, Luis González Armijo, realiza monturas totalmente artesanales, como las que se hacían antes. Comienza rellenando la lona con paja de centeno, le coloca una estructura de hierro y después lo forra todo con cuero y otros ornamentos. Un trabajo en el que emplea unas 70 horas. Una auténtica obra de arte hecha con paciencia y sabiduría. El secreto para que una montura se adapte bien al caballo está en el empleo de la paja de centeno o bálago, un material cada vez más difícil de conseguir ya que no se siembra por estas latitudes y hay que traerlo de fuera, pero con el handicap de que hay que segarlo a mano. Para comprar estos productos u otros de cuero dirigirse a su taller en la calle Corredera, junto al Supermercado Covirán.

Artesanía pastoril

Artesano de la enea, fue homenajeado en Sevilla en un acto donde se le reconoció la labor artesanal realizada a lo largo de su vida junto a otros 32 artesanos de diferentes trabajos en vías de desaparición, ocho de ellos onubenses. Todo ello se inscribe dentro de la primera fase llevada a cabo por el Fondo Andaluz de Recuperación del Conocimiento Artesano, organismo dependiente de la Consejería de Economía y Haciendo de la Junta de Andalucía.
Marín Lorenzo, de 76 años de edad, recibió el galardón de manos de la consejera Magdalena Álvarez y se siente muy orgulloso por esta distinción. Eugenio aprendió a echar los asientos de enea. de forma autodidacta, obligado por la necesidad, al carecer de los enseres necesarios en la casa de campo que habitaba con su mujer. Desde los taburetes de corcho o posetes hasta las cucharas de madera, pasando por los dornillos, machacaderas, cazos y sillas Eugenio aprendió a fabricarlo todo utilizando diversos materiales: madera, corcho, juncos, enea, etc. Posteriormente y tras su jubilación, Eugenio se dedica a echar asientos de enea a las sillas viejas y también a fabricar pequeñas sillas de madera y enea, además de otros muchos trabajos de la artesanía pastoril. 
Para adquirir alguno de sus productos dirigirse a su taller en la calle Postigo, junto al supermercado El Jamón.